domingo, 25 de enero de 2015

Libro compartido: 'Un monstruo viene a verme', Patrick Ness

Género: Ficción Contemporánea

Editorial: Nube de tinta

Páginas: 208

Año de publicación: 2014






¡Muy buenas! Estamos muy emocionadas de presentar esta nueva aportación para el blog, se trata nada más y nada menos que del LIBRO COMPARTIDO. La idea surgió del hecho que de vez en cuando nos gusta leer los mismos libros para darle más tertulia al asunto y pensamos que ¿por qué no íbamos a introducir esta sección en el blog? Eso sí, un poco diferente, puesto que a través de una serie de ítems, cada una aportará su opinión al respecto. Así que aquí lo tenéis…un libro, dos puntos de vista. ¡Disfrutadlo!

Antes de nada, una breve sinopsis de libro para que os pongáis en situación:

Esta novela explica la historia de Conor, un chico que tiene a su madre enferma y que de repente, cada noche (concretamente siete minutos pasados de la medianoche) empieza a recibir la visita de un monstruo. No uno terrorífico, sino uno muy particular con forma de Tejo (un árbol con bayas venenosas) que quiere saber algo de él: la verdad y que no se irá hasta que se la explique.

Una cita:

Sandra: “Las historias eran criaturas salvajes, muy salvajes, y salían disparadas en la dirección que menos esperabas”. Simplemente porque me recordó una gran verdad: la vida no siempre es como quieres y, además, puede cambiar en cualquier momento.

Raquel: “Tu vida no la escribes con palabras -dijo el monstruo-. La escribes con acciones. Lo que piensas no es importante. Lo único importante es lo que haces.”Esta cita me dejó pensativa, tiene toda la razón, no importa aquello que has pensado alguna vez, ya sea malo o no, lo que realmente importa son las acciones de uno mismo.

Un momento:

Raquel: Uno de los momentos que más me produjo impacto fue cuando el monstruo presiona a Conor para que le diga la verdad, sin reparos, lo que realmente lleva esperando el monstruo durante toda la historia, esa escena te encoge el alma, porque te transmite un sufrimiento y una agonía muy intensa que no cesa hasta que finalmente el niño decide explicar lo que siente realmente ante la situación que le plantea el monstruo.

Sandra: Sin dudarlo ni un poquito, el instante en el que Conor se da cuenta de la destrucción del salón de casa de su abuela, épico. Me ha recordado demasiado a cuando de pequeña rompía algo y pensaba “¡Mierda y ahora qué, me van a matar!” y me quedaba totalmente paralizada del miedo aunque luego simplemente me echasen un poco de bronca.

Una emoción que te invada al leerlo:

Sandra: Pena pero a la vez también ternura e impotencia. Imposible quedarse con un solo sentimiento. Me explico: todos estos sentimientos me los transmite el personaje principal, Conor, ya que está pasando por un muy mal momento: su madre tiene cáncer. Una situación muy dura para un niño de 13 años… es por eso que me dan ganas de abrazarle y decirle: “es duro pero saldrás adelante, ya verás como todo irá bien”.

Raquel: Como bien dice Sandra, es imposible quedarse con una sola emoción en este libro, porque te transmite una ternura a la vez que cierto miedo por expresar lo que uno sin querer, con tanta inocencia, puede llegar a sentir. Es como una montaña rusa de emociones, por momentos sientes pánico, tristeza, rabia e impotencia, sin olvidar esa parte de cariño entre el protagonista y su madre.

Un personaje:

Raquel: Estoy bastante satisfecha con todos los personajes del libro, pero si tengo que escoger a uno, seria la madre del protagonista. En realidad se muestra una debilidad permanente en este personaje, pero también refleja la lucha interior contra su enfermedad y la esperanza que le da al protagonista por las ganas de vivir. De hecho, este personaje dice una frase que me dejó k.o en el momento de leerla “Ojalá me quedaran cien años –dijo con voz muy baja-. Cien años que darte”, simplemente sublime.

Sandra: El monstruo, brutal. Muy bien creado a partir de las palabras, totalmente gráfico y plástico. Puedes llegar a imaginarte hasta su voz. Además, tiene una gran profundidad y consigue hacerte reflexionar.

Un adjetivo que le darías a la obra:
Sandra: Intrigante. A cada capítulo te deja queriendo leer más para saber qué más va a suceder. Y al final… te quedas con la sensación de si realmente el monstruo existe o es producto de la imaginación de Conor.

Raquel: Conmovedora. Cuando vas pasando las páginas y comprendes que toda la verdad se reduce a algo tan inocente es cuando te despierta esa sensación de ternura y conmoción, para dejarte con un final totalmente dulce, sensacional para la ocasión.

Una razón para leer el libro:

Raquel: Porque es un libro que te hace reflexionar, te produce un cúmulo de sentimientos que difícilmente encuentras en los libros que se escriben hoy en día. Cuando terminas las páginas sientes que realmente ha merecido la pena.

Sandra: Porque es diferente a cualquier libro de relato fantástico que puedas haber leído ya que mezcla aspectos de la vida real, aspectos duros, como es ver el cáncer en una persona querida y en parte también el bullying.

Un color que te inspire al pensar en el libro:

Sandra: Verde, por las hojas del tejo que Conor observa desde la ventana de su cocina.

Raquel: Negro, por la oscuridad de la noche cuando Conor sueña con su pesadilla y cuando espera al monstruo para que le cuente las historias.

Un olor que recuerdes al pensar en el libro:

Raquel: Olor a hospital y olor a tierra húmeda, por las visitas a la madre y por el rastro que deja el monstruo al irse.

Sandra: Olor a bosque, naturaleza, tierra batida… por el verde del árbol.

Una descripción que aparezca en el libro:

Sandra: “Era demasiado grande, por supuesto, y tenía que agacharse mucho, pero mucho, para caber debajo del techo; las ramas y las hojas se retorcían y se apretaban para ocupar menos espacio, pero allí estaba, llenando todos los huecos”. Esta descripción me ha gustado especialmente por lo plástica que es, consigue que al leerla dentro del contexto del libro te imagines perfectamente la situación. Además, la repetición de sonidos en ramas, retorcían y apretaban crea la sensación del crujir que emitían al encogerse y eso hizo que me metiera aún más en el momento.

Raquel: “¿Qué quién soy? –rugió de nuevo-. ¡Soy la espina dorsal que sostiene las montañas! ¡Soy las lágrimas que lloran los ríos! ¡Soy los pulmones que respiran el viento! ¡Soy el lobo que mata al gran ciervo, el gavilán que mata al ratón, la araña que mata a la mosca! ¡Soy el gran ciervo, el ratón, la mosca que son comidos! ¡Soy la serpiente del mundo que se devora la cola! ¡Soy todo lo que no está domesticado y no se puede domesticar! –Acercó a Conor uno de sus ojos-. Soy esta tierra salvaje, y he venido a por ti, Conor O´Malley.” Cuando el monstruo responde al protagonista sobre quién es él realmente, me encanta esa pasión que pone al describirse de tantas formas, pretendiendo decirle que él puede ser cualquier cosa, que no importa quién sino lo que él pretende hacer.

Calificación: 

Sandra:
★★★★

Raquel:
★★★★★

¿Os ha gustado la nueva idea sobre un libro compartido? Para nosotras ha sido una experiencia muy entretenida. Estamos seguras de continuar con esta sección ¡sin duda!

No queremos despedirnos sin antes obsequiaros con un excelente booktrailer de la novela que nos ha parecido ideal para cerrar la entrada de hoy.



RyS 

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